Turbo Kid

Un año más, acudimos fieles a la cita con la "Noche Innombrable" de Jesús Palacios el primer Sábado del Festival Internacional de Cine de Gijón. Tras una gamberrada de corto titulado "Amor de mono", tocaba ver "Turbo Kid", una película que encaja a la perfección en lo que uno espera de una noche así.

Título original: Turbo Kid.

Estreno: Agosto de 2015 (USA).

Directores: Anouk Whissell,

Yoann-Karl Whissell y Francois Simard.

Actores: Munro Chambers.

Michael Ironside.

Laurence Leboeuf.

Edwin Wright.

Aaron Jeffery.

Duración: 93 minutos.

Género: Acción, aventuras, sci-fi.

Mi nota: 6,5/10.

Escrita, dirigida e interpretada (pequeños papeles) por los hermanos Whissell (Anouk y Yoann-Karl) y Francois Simard. Es su primer largometraje tras varios cortos, el último de los cuales es precisamente "T is for Turbo", antecesor de la película. La estrenaron en el festival de Sundance y ha ganado premios en San Sebastian y Sitges.

(A partir de aquí, SPOILERS)

The Kid (Munro Chambers) es un chaval que vive bajo tierra en un páramo en el que el agua es un preciado tesoro. Se dedicar a recoger chatarra en bicicleta y a coleccionar objetos frikis que encuentra, especialmente cómics.

Pero su vida cambiará radicalmente el día que conoce a la extraña Apple (Laurence Leboeuf), una pirada que se pega a él y comparte sus aventuras cuando se ven obligados a enfrentarse al malvado Zeus (Michael Ironside), el tirano de la zona. Sus destinos se cruzan también con los de Frederic (Aaron Jeffery), un tipo duro que también tiene cuentas pendientes con Zeus. A medio camino entre "Mad Max" y "Kung Fury", es un curioso homenaje a las películas apocalípticas con tintes ochenteros, mucha casquería y chorros de sangre. 

Precisamente los puntos en común con "Kung Fury" le restan frescura, pero aun así tiene momentos muy divertidos, casi todos protagonizados por el personaje de una Laurence Leboeuf que borda su papel. Con la banda sonora pasa más de lo mismo: mola el sonido tecno ochentero pero empieza a estar demasiado visto ya. Con todo, recomendable para pasar un buen rato friki.