Llevaba tiempo sin ir al cine. El Domingo, después de comer, tocaba ver la actual número 1 en la taquilla de la mayoría de salas del mundo: "Iron Man 3". Antes de nada, situar mi contexto: los únicos cómics que he leído en los que aparece Iron Man son los de "Ultimates: Vengadores". Aparte de eso, se puede decir que desconozco por completo al personaje desde ese punto de vista (aunque en breve espero leer algo más). En cuanto a las películas anteriores, que algun día también reseñaré, decir que me encantó la primera y que la segunda ya bajó bastante el nivel. En cualquier caso, Tony Stark es, de largo, mi vengador favorito.
Estreno: 26 de Abril de 2013.
Director: Shane Black.
Actores: Robert Downey Jr.
Gwyneth Paltrow.
Don Cheadle.
Guy Pearce.
Ben Kingsley.
Rebecca Hall.
Jon Favreau.
Ty Simpkins.
Duración: 130 minutos.
Género: Acción, Aventuras, Superheroes.
Hay que empezar hablando del cambio de director: tras las 2 primeras entregas, Jon Favreau sigue como actor interpretando a Happy Hogan pero cede el testigo de la dirección a Shane Black. Para quienes no sepan quien es, escribió el guión de todas las "Arma Letal" y esta es su segunda película como director después de "Kiss Kiss, Bang Bang" donde también contó con Downey Jr. La serie sigue la continuidad de las películas de MARVEL situando los hechos después de lo que ocurre en "Los Vengadores".
(A partir de aquí, SPOILERS)
Como digo, la acción transcurre posteriormente a lo que pasó en New York en "Avengers". Tony Stark anda algo traumatizado por aquellos hecho y eso le ocasiona problemas en su relación con Pepper Potts (Gwyneth Paltrow). Entre tanto, vemos un flashback de la noche de año nuevo 1999-2000 para presentarnos los personajes de Guy Pearce y Rebecca Hall. Repite Don Cheadle como James Rhodes, que ahora es "Iron Patriot", un Iron-Man a las órdenes del gobierno de EEUU. Por último, un terrorista internacional, llamado "el Mandarín" interpretado por Ben Kingsley. Un reparto bastante completo.
Happy resulta herido en un ataque del Mandarín y Tony Stark, bocazas como es, reta al terrorista a ir a por él, dando incluso la dirección de su casa. El resultado ya lo hemos visto en los trailers (que últimamente acostumbran a reventarnos todo el argumento de las películas): 3 helicópteros bombardean la modesta vivienda de Stark y él termina herido, con la armadura estropeada y al otro extremo del país. Allí encontrará a un niño (Ty Simpkins) que le ayudará en su misión de volver para terminar con los malos. La película cuenta con los mismos ingredientes que las 2 anteriores: esa mezcla entre la típica acción del cine de superheroes y el humor sarcástico del personaje de Robert Downey Jr. Aunque el director vuelve a contar con grandes actores para los papeles de los villanos, estos no terminan de dar la sensación en ningun momento de ser temibles. También sabe a poco la presencia de "Iron Patriot", que por lo visto en la segunda parte podría ser un buen "sidekick" para Stark. En el otro lado de la balanza, un par de sorpresas con las armaduras que son de lo mejor de la película y la escena (otra vez reventada por culpa del trailer) de Iron Man cogiendo uno a uno a las personas que han salido disparadas del "Air Force One" antes de estrellarse contra el suelo.
Resumiendo, lejos del nivel de la primera pero posiblemente incluso mejor que la segunda, la película cumple con lo que promete (acción, entretenimiento y risas) pero tenía ingredientes para estar algo mejor. Aun así, recomiendo verla y, como suele pasar en casi todas las de MARVEL, que os quedeís hasta el final de los títulos de crédito (aunque la escena no es gran cosa). Mi nota es un 7.
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