Casi todos los años en el F.I.C.X. (Festival Internacional de Cine de Gijón) hay un puñado de películas que uno quería ver pero por una razón (trabajo) u otra (coincidencia de horarios con otras películas o eventos) no puede. Al ser películas que rara vez se estrenan en salas comerciales, toca esperar a que aparezcan por la red. Es el caso de "Le magasin des suicides", una película de animación francesa estrenada el pasado año.
Estreno: 26 de Septiembre de 2012.
Director: Patrice Leconte.
Actores: Bernard Alane.
Isabelle Spade.
Kacey Mottet Klein.
Isabelle Giami.
Laurent Gendron.
Duración: 79 minutos.
Género: Animación, Comedia, Musical.
La película está basada en el libro homónimo del escritor francés Jean Teulé, publicado en 2007.
(A partir de aquí, SPOILERS)
En una sociedad futura (desgraciadamente cada día menos alejada de la realidad) la última moda es suicidarse. Con un contexto tan desolador, la película nos presenta a la familia Tuvache, que regenta una tienda donde se vende todo aquello susceptible de ser utilizado como medio para tan macabro fin. Desde veneno hasta cuerdas para ahorcarse pasando por pistolas e incluso bloques de hormigón para atarse al tobillo antes de tirarse al fondo del mar.
Mishima es el padre de familia, casado con Lucrecia y padre de Vincent y Matilyn, que llevan el mismo camino (convertirse en la alegría de la huerta). Todo cambiará con la llegada de un tercer hijo que no tiene nada que ver con el resto de la familia: Alan sonríe en lugar de estar triste, canta y baila en lugar de ayudar a la gente a decidir como terminar con sus vidas. Aunque lo más fácil sería resignarse a ser como los demás, Alan luchará por cambiar la forma de ver la vida de sus padres y hermanos. Partiendo de una idea tan original, en mi opinión la película se queda bastante corta. Desconozco si la razón es ser fiel al libro, pero creo que la temática daba para bastante más. Lo mejor que tiene es el humor negro, la ironía y al cantidad de segundas lecturas que se pueden hacer mientras la ves. Lo peor, que al final todo está al servicio de un final demasiado predecible y más digno de una película Disney que de un cine más independiente y libre de ataduras. Es por eso que mi nota no puede ser más de un 3,5.
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