La madrugada del Domingo al Lunes se emitió el último capítulo de una serie que ya es historia de la televisión: "Juego de Tronos". Tras esperar más de año y medio desde que finalizó la anterior, a mediados de Abril la HBO estrenó una temporada formada por 6 capítulos, eso si, más largos de lo habitual.
Título original: Game of Thrones.
Estreno: 15 de Abril de 2019.
Creadores: David Benioff y D.B. Weiss.
Actores: Lena Headey.
Peter Dinklage.
Emilia Clarke.
Maisie Williams.
Kit Harington.
Nikolaj Coster-Waldau.
Sophie Turner.
Gwendoline Christie.
Iain Glen.
Jerome Flynn.
Duración: de 60 a 80 minutos. 6 capítulos.
Género: Aventuras, Fantasía.
Mi nota: 8,2/10.
Creada por David Benioff y D.B.Weiss (que también han dirigido el último capítulo) y ambientada en el universo creado (y abandonado durante los últimos años) por George R.R. Martin. A falta de ver lo que pasa con los libros, esto no acaba aquí y ya es oficial que se va a empezar a rodar el primer spin-off de la serie, en el que participará, entre otros, Naomi Watts.
(A partir de aquí, SPOILERS)
Jon Snow (Kit Harington) y Daenerys (Emilia Clarke) vuelven al Norte para librar la batalla final contra los caminantes blancos. Los dos primeros capítulos son los preliminares de esa batalla, marcados por la revelación del gran secreto sobre la identidad de Jon y con sus reencuentros, presentaciones y calma tensa antes de la temida llegada del Rey de la Noche y los suyos.

Es difícil dar una opinión sobre algo de lo que se dicen tantas cosas y en consecuencia tantas tonterías. Gente que critica gratuitamente porque no ha terminado como ellos querían, porque se veía muy oscuro o porque salen vasos del Starbucks. La serie ha terminado y lo ha hecho como debía, es decir, como han querido sus creadores/guionistas. A partir de ahí nos puede gustar más o menos y se pueden criticar cosas, pero sin ser haters. Para mí el mayor problema de la última temporada viene heredado de la anterior y es el manejo de los tiempos. Partiendo de la base de que había un presupuesto y un tiempo limitados, hay cosas (mal) resueltas a la carrera. Y esto resulta especialmente sangrante cuando luego dedican tanto metraje a escenas que aportan poco o nada. Viendo ciertos giros de guión imagino que todo esto también es un poco consecuencia de no tener muy claro por donde iban a tirar hasta el final. Otro problema heredado (en este caso de forma exclusiva en el tercer capítulo) es lo de forzar situaciones hasta el límite de forma innecesaria para llegar a la épica. Dicho todo esto y pasando a lo positivo, seguimos disfrutando de muchos capítulos con una factura y una producción dignos de la gran pantalla. En el caso de los dos "grandes" capítulos (el tercero y el quinto) a mí personalmente consiguen meterme en la pantalla y generar sensaciones de ansiedad, agobio y tensión. Las escenas con los dragones mejoraron hasta rozar la perfección. En cuanto a interpretaciones, nada nuevo en cuanto a los valores seguros de la serie (Headey, Dinklage...) y sorpresa agradable en el finale con Clarke y Harington pareciendo por momentos actores profesionales. En definitiva, las dos últimas temporadas han padecido de los mismos errores, pero aun así se han disfrutado mucho y no desmerecen el conjunto de una serie que ha hecho historia.
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