lunes, 20 de febrero de 2017

Happy Valley

Mientras espero la tercera temporada de "Broadchurch", sigo con otra serie británica que he visto en Netflix. Esta vez se trata de una serie de la BBC que se estrenó en 2014, titulada "Happy Valley", que terminará con una tercera y última temporada.

Título: Happy Valley.
Estreno: 29 de Abril de 2014.
Creador: Sally Wainwright.
Actores: Sarah Lancashire.
Siobhan Finneran.
Shane Zaza.
Charlie Murphy.
James Norton.
Rhys Connah.
Ishia Bennison.
Duración: 12 capítulos de 58 min.
repartidos en 2 temporadas de 6 cada una.
Género: Crimen, drama.
Mi nota: 7,8/10.

Creada por Sally Wainwright ("At Home with the Braithwaites" y "The Amazing Mrs Pritchard"), la serie ganó el BAFTA a la mejor serie dramática en 2015 entre varios premios más. La primera temporada se emitió entre Abril y Junio de 2014 y la segunda entre Febrero y Marzo de 2016. Para la tercera tendremos que esperar, como mínimo, hasta 2018. En un primer momento la protagonista de la serie dijo que no renovaría para la que será la ultima temporada de la serie, pero parece que lo ha reconsiderado y finalmente si estará.

(A partir de aquí, SPOILERS)

Catherine Cawood (Sarah Lancashire) es una sargento de policía en una pequeña localidad situada en un valle del condado de West Yorkshire, cerca de Leeds. Su vida no ha sido fácil: vive con su hermana Claire (Siobhan Finneran), ex-alcohólica, y con su nieto, fruto de una violación que acabó con el suicidio de su hija.

El valle es un sitio castigado por las drogas, pero aparte de eso, bastante tranquilo. Hasta que la vida de Catherine se ve sacudida por dos hechos que terminan estando relacionados. Por un lado, el secuestro de la hija de un adinerado empresario local, y por otra parte, el regreso a la zona del hombre que violó a su hija, Tommy Lee Royce (James Norton). La primera temporada nos cuenta el secuestro, mientras que en la segunda la serie se reinventa con un nuevo caso y nuevos personajes, aunque también sigue de fondo la trama de la familia Cawood y Tommy Lee.

Otra sorpresa agradable y británica. Huyendo de los estereotipos de las series policíacas, aquí tenemos un retrato de lo que sería el trabajo del cuerpo en un pequeño pueblo golpeado por la droga. El papel y la interpretación de la protagonista derrochan carisma y personalidad, pero yo también destacaría al resto del reparto, empezando por la hermana y terminando por el villano. Otra joya en pequeñas dosis, 6 capítulos por temporada y un par de años de espera entre medias. Pero merece la pena, totalmente.

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