Las tres caras del miedo

Últimamente estoy viendo poco cine y ,salvo excepciones, nada especialmente memorable. Así que me voy hasta Febrero para recuperar alguna película que tenía pendiente de reseña. "Las tres caras del miedo" (en Italia "I tre volti della paura" y en USA "Black Sabbath") es una película de terror del año 1963. La tenéis en Filmin.

Título: Black Sabbath / Las tres caras del miedo.

Título original: I tre volti della paura

Estreno: 1963.

Director: Mario Bava.

Actores: Michèle Mercier.

Lidia Alfonsi.

Boris Karloff.

Mark Damon.

Susy Andersen.

Massimo Righi.

Rika Dialyna.

Glauco Onorato.

Jacqueline Pierreux.

Duración: 92 minutos. 

Género: Terror.

Dirigida por Mario Bava. Por un lado llevaba bastante tiempo queriendo ver alguna película del director italiano por culpa de Alejandro G. Calvo, que siempre habla maravillas de su cine y cuyas películas son habituales en sus famosos Tops. Pero el último empujón para ver esta (también he visto "Bahía de Sangre") es que vi que Quentin Tarantino la mencionó como una de sus películas favoritas.

(A partir de aquí, SPOILERS)

 

La película está formada por tres historias cortas (adapta varios cuentos de la literatura clásica) con tres puntos en común: el género (terror), el protagonismo femenino y los elementos sobrenaturales.

En la primera ("El Teléfono") tenemos a una hermosa mujer (una prostituta) que está sola en casa y recibe unas extrañas llamadas telefónicas. Dudando entre si se trata de una broma pesada o una amenaza real, recurre a una amiga. En la segunda ("Los Wurdalak") un distinguido viajero se encuentra un cadáver y poco después llega a una casa. La familia que la habita le recibe y le explica una extraña maldición de la zona por la que los muertos vuelven convertidos en extrañas criaturas que se alimentan de la sangre de los vivos. Y por último en "La gota de agua", otra mujer (una enfermera) pagará las consecuencias de robarle un anillo a una difunta.

Terror clásico en estado puro. De esas películas que te pueden gustar más o menos (a mí, que me encanta el género, me sirvió para pasar un buen rato) pero no se puede negar su influencia en el cine más actual. La mano del director deja su sello mediante el uso de los colores y su capacidad para mezclar tensiones (sexual y terrorífica) incluso con algún momento cómico. En negativo el evidente bajo presupuesto y algunas carencias interpretativas de sus protagonistas. Me gustaron mucho las dos primeras historias, no tanto la tercera.